Ginebra es la ciudad que se encuentra junto al lago Lemán. Su símbolo demuestra lo unido que está el lago a la ciudad: el Jet d'eau, que vigila la ciudad con su fuente en la cuenca del lago.

El lago Lemán también allanó el camino para la carrera náutica de Justine Mettraux. Nació en Versoix y durante su infancia pasó mucho tiempo a orillas del lago o en el barco de sus padres. Aquí es donde aprendió a jugar con el viento. Así nació su pasión por la navegación.

Justine Mettraux se mudó a Bretaña para seguir con su carrera de deportista. Todavía hoy le gusta recordar sus tiempos como principiante. «Las condiciones en el lago Lemán son ideales para aprender este deporte», cuenta.

Todavía hoy Justine Mettraux se sigue sintiendo atraída por el lago Lemán. «El lago tiene la reputación de ser bastante inestable: el viento cambia a menudo», dice. «Con estas condiciones, me encanta volver». «Siempre me emociona mucho navegar».

De hecho, la navegación a vela tiene una larga tradición en el lago Lemán. La Société Nautique de Genève organiza aquí el Bol d'Or desde 1939, una de las regatas de lago más importantes de Europa. La carrera se extiende a lo largo de 125 kilómetros, con más de 500 veleros participantes.

Pero Justine Mettraux no solo se siente atraída por el lago Lemán por la navegación. «Me gusta mucho hacer paddle surf aquí. Es el lugar perfecto para practicarlo, porque las aguas suelen estar tranquilas por las mañanas. El lago está como un plato y se puede ver hasta el fondo», comenta.

El lago pertenece a Ginebra como el Jet d'eau pertenece a la cuenca del lago. Por eso no es de extrañar que muchos habitantes de Ginebra aprovechen siempre la posibilidad de utilizar las lanchas «Mouettes» para ir de una orilla a la otra. En los últimos años se han presentado proyectos para unir más el lago y la ciudad. Por ejemplo, una playa con área recreativa.